miércoles, noviembre 28, 2018

Silencio






De esos instantes solo queda el silencio,
Luego un par de rostros abandonados en soledad,
Entre el asombro, la incertidumbre, y risas nerviosas,
La ilusión, la alegría ruidosa, pero al final el silencio.

Y ese amor creció sin requerir una palabra,
Desbordado en sueños, delirios, y uno u otro temor.
Creció sin pedir nada, sin decir algo, sin abrir sus ojos,
Creció su cuerpo, latió su corazón, pero al final el silencio.

Lo sentimos sutil, inquieto, en el sosiego de la noche.
Nos hizo fuertes, mas nobles y ese amor creció,
Y en algún momento, en su silencio, sin pedir nada,
Sin decir algo, si abrir sus ojos, su inquietud cesó.

El silencio de la madrugada, el llanto interrumpió,
Luego un par de rostros abandonados en soledad,
Y entre pasillos fríos, mustios, de luces encandilantes,
Se silenciaron el dolor y la pena, bajo un elixir amnesiante.

De esos instantes solo queda el silencio,
Aunque alienta el saber que no conoció sufrimiento.
Y de aquellos silencios ahora queda tu mirada,
La que sigue siendo jubilosa, noble y enamorada.


Jonathan Diaz Vanegas

1 comentario:

Unknown dijo...

Es triste pero, muy lindo.